Cuanto más pienso más aborrezco pensar por eso últimamente esto está abandonado. Busco en lo más profundo de mis entrañas un sólo motivo para que mi vida no se altere con cada pensamiento que se presenta en mi mente cuando estoy a solas. No estoy triste, simplemente me da miedo pensar cada día un poco más. Me aterroriza no poder imaginar un futuro sólido, tiemblo al pensar en qué haré después de verano e incluso en qué haré mañana.
No sé cuánto tiempo estaré sobre la faz de la tierra pero quiero vivir el presente sin pensar en las consecuencias de un futuro a medio o largo plazo, por eso será que actúo como actúo. Aborrezco pensar como Garfiel aborrece trabajar, a ver si nos centramos un poquito, Lisa, que ya son horitas.
1 comentario:
Para que temblar cuando puedes dedicar todo tu tiempo a vivir???
Yo ya no tiemblo, ya no lloro y me va mucho mejor. Pase un tiempo pensando en lo terrible de pensar tanto (algo paradogico, no?),pero no se... ahora me gusta es... distinto.
Me ha gustado mucho tu blog.
Un beso
Publicar un comentario