El blog de la zoocióloga que quería ser escritora

ETERNAMENTE EN OBRAS - Este blogue naceu da necesidade de sacar fora o meu mundo interior, como ferramente que me axudou a aprender a expresar e transmitir sentimentos en sensacións. Escribir foi o que fixo de min unha persoa que conseguiu evolucionar ata o punto no que me atopo hoxe.

Neste blogue atoparás textos en galego e en castelán porque dependendo do día no que esscriba e dos sentimentos do momento a lingua que se pronuncia pode ser calquera das dúas.

20 octubre, 2005

Diario de un gorrión (recopilación) - Marzo 2005

CAPÍTULO I: Una historia de pájaros
El pajarito que tan alegre cantó vio sus silvidos apagados por el paso del tiempo, incómodo en el nido junto a su familia decidió volar y probar suerte en el frondoso bosque. El pájaro gorrión que antes vivía en un roble frondoso, probó suerte en un eucalipto, lo vio alto y con buen ambiente. En él vivían dos pájaros más, un cuervo y una lechuza. La lechuza hacía vida nocturna y el cuervo iba y venía, la vida zoocial en el árbol era poca o nada. La lechuza y el cuervo se llevaban bastante bien, el gorrión, tan peculiar él, se empezó a sentir solo. Se sentía como una hoja más en el árbol. La fauna que transitaba ese árbol era bastante, desde otros cuervos, lechuzas, golondrinas, halcones, palomas... Al gorrión le gustaba la compañía de sus amigos y de sus compañeros. El árbol en sí, no estaba mal, buenas vistas, altura suficiente como para ver venir los peligros, pero la incomodidad que empezara a sentir el gorrión era cada día mayor. El ambiente empezó a tornarse poco a poco en algo que nunca había pensando el gorrión. En tiempos de temporal el árbol se balanceaba demasiado, ¡cómo echaba de menos el roble! Cierto día, llendo con su gorriona, conoció a otras aves semejantes. Ellas provenían también de un roble muy parecido y habían cambiado de nido. Se instalaron en un pino, algo apartado del frondoso bosque y vivían felices. El gorrión casnado de la incomodidad de su hogar a penas pausaba el vuelo en el eucalipto, paraba solo a dormir. Gorrión y Gorriona empezaron a frecuentar su árbol y aves nuevas reconocieron un bajón en el cantar del gorrión. Ofrecieron entonces una rama habitable para que se mudase el gorrión. El gorrión pensó y pensó y todavía hoy se lo sigue pensando... ¿qué pensarán cuervo y lechuza de la marcha del gorrión? ¿Debiera marchar y cambiar de aires?
CAPÍTULO II: Gorrión
Qué sorpresa se llevo el gorrión antes de ayer, cuando llega a su árbol y no encuentra a ninguno de los habitantes del árbol. Por la noche no estaban, y cuando salió el sol tampoco. El gorrión se extrañó y se lo comentó a su bandada, gorriona, pardal, gaviota y albatros, quienes habían ofrecido su árbol para cobijo del gorrión. El gorrión, tonto de él, hizo por comunicarse con cuervo y lechuza, a pesar de que el pardal le había dado el consejo de dejarlo pasar (porque si hubiese pasado algo y fuera importante, lechuza y cuervo, harían por transmitir la noticia) aún así estableció comunicación con ellos, resulta que habían cambiado temporalmente de bosque por ir a la tierra de lechuza. El gorrión algo afligido pensó "Gracias por avisar". Para sus adentros el gorrión iba juntando poco a poco más motivos para abandonar el eucalipto y llegó el fin de semana, era hora de hacer una visita al roble de donde procedía, por lo menos durante un par de días se sentiría agusto en su hogar. El pequeño viaje lo haría junto con pardal, gaviota y albatros, a quienes le estaba bien agradecido.
CAPÍTULO III: Al fin, el roble
Llegó el fin de semana y el gorrión llegó al roble donde nació. Cuando iba de camino con pardal el sólo ver el paisaje lejano de su bosque le estremeció el cuerpo. La sensación de sentirse a gusto tan solo llegar al roble le inundó la mente. Ahora se sentía bien, dejaba por unos días la incomodidad del eucalipto.Pardal dejó al gorrión al pie del roble, se despidió y volvió junto con golondrina a su bosque natal. El gorrión nada más subir al roble picoteó algo de alimentos y se metió en su nido. Durmió de un tirón hasta la mañana siguiente, se levantó se acicaló e hizo los menesteres que mamá gorriona le pidió. La sensación de paz y tranquilidad se hacía mayor cada minuto que pasaba, ni el recuerdo de pensar en volver al eucalipto podía hacerle sentir mal.
CAPÍTULO IV: La vuelta
Tras un corto fin de semana de tranquilidad, sosiego y relax, el gorrión volvió al bosque donde mora. Volvió al eucalipto, su hermano gorrión mediano le había acompañado, y al posarse ante el tronco del arbol un aire de pequeña esperanza despertó en su interior. Sabía que iba a sentirse como en el roble pero esperaba, por un instante, que el ambiente allí hubiera cambiado.Cuando se adentró en las alturas del eucalipto notó que esa pequeña y momentánea sensación se evaporaba. Lechuza y Cuervo habían venido, se habían traido consigo a tres pájaros más. Gorrión saludó con esperanza de recibir una respuesta afectuosa, pero no. Otra vez se volvió a sentir solo ante tanta multitud, llamó a su gorriona y salieron un rato. Cuando volvieron el comportamiento siguió igual y se metieron directamente al nido. Alas entrelazadas, se quedaron así durante mucho rato. Volvieron a salir para volver solo gorrión, en ese momento pardal entró en escena junto con albatros y gaviota. Otro rato fuera del eucalipto, hasta que por la noche, pardal y gorrión se acercaron hasta el eucalipto, pasaron un buen rato y pardal voló hasta su árbol. Gorrión se fue directamente al nido, pensando que al día siguiente tendría que hablar con Cuervo y Lechuza, sobre la mudanza que se esperaba para este mes.
CAPÍTULO V: Resolución...
Como ya se había dicho ayer Gorrión tenía que comunicar a Cuervo y Lechuza su decisión de cambiar de árbol. Resultó más fácil de lo que nunca había pensado. Empezó por comentarles que no se sentía a gusto, que se sentía ignorado y que por eso se había puesto a buscar un nuevo árbol con otras aves. Resulta que no era nada personal, que tenían una mala temporada. Ante la idea de que Gorrión se marcharía en, aproximadamente, un mes no se sorprenderion ni tampoco les pareció mal. Lechuza estaba un poco distante por problemas con su tórtolo, Cuervo por el contrario se había tomado algo por la tarde que, a modo de ver de la bandada, le había sentado un poco mal, Estaba excepcionalmente simpático. Cada ave volvió a su nido, gorrión se fue a dormir tranquilo por una vez en unas semanas.
CAPÍTULO VI: Arbol nuevo
Al fin, tras una semana de sobrevolar el bosque en busca de un árbol decente que no costase mucho acceder a el, encontraron algo mínimamente decente. Situado estreatégicamente cerca de los lugares que frecuentan Gorrión, Pardal y Gaviota. Un árbol habitable donde en unos días Gorrión, Pardal y Gaviota van a emprender una lucha por la supervivencia. Perdón me estoy desviando del tema central, no era una lucha por la supervivencia sino una convivencia normal. PD: Esperamos que las razas "avícolas" no sean demasiado incompatibles.

CAPÍTULO VII: Pajaradas
Gorrión, a punto de mudarse de árbol volvió al eucalipto sabiendo que en pocos días se mudaría. Había estado por la tarde con la bandada al completo. Se preparó para cenar. Entretanto Cuervo y Lechuza se acicalaban para salir, el hermano de Cuervo y Chorlito estaban en la cocina mientras Gorrión se alimentaba. Entonces fue cuando salieron a trasnochar, lo único que pidió Gorrión cuando se despedían es que al llegar no hiciesen demasiado ruido. Qué sorpresa se llevó el gorrión, cuando a las 6:05AM, se despertó debido a unos murmullos que se escuchaban desde el otro extremo del árbol. Harto de este tipo de situaciones lo único que hizo Gorrión fue gritar "¡Un poquito de porfavor!", entonces los murmullos acallaron por un momento. Poco después los murmullos se trasladaron al lado de su nido y aguantó unos minutos más, cuando se le hincharon las alas se asomó y lo único que dijo fué "Gracias ¡Eh!", entonces los pájaros invitados echaron a volar. Lechuza y Cuervo se metieron en el nido de Cuervo y hasta esta mañana.Qué tranquilidad espera a Gorrión en un árbol donde los pájaros con los que va a vivir son algo más civilizados... Eso es, como dicen en mi tierra "Fariña doutro saco".

CAPÍTULO VIII: Zoociedad
Gorrión se instaló el martes en su árbol nuevo, junto con Pardal y Gaviota, Albatros se instaló también pero provisionalmente. Las ramas, unas más grandes que otras, se echaron a suerte y, cosas que pasan, Gaviota se quedó con la grande y Gorrión con la pequeña. El miercoles amaneció tranquilo, Gorriona se pasó a despertar a su "tórtola" el Gorrión, que dormía plácidamente en su nido. El arbol estaba plagado de vida, Albatros, Pardal y Gaviota paseaban de rama en rama para acicalarse y salir al bosque. A la hora del desayuno éran cinco comensales y eso agradaba mucho a Gorrión, que en su antiguo árbol partía solo por la mañana sin ver vida pululando por el árbol. Cuando todos los pájaros volvieron por la tarde-noche a su refugio Gorrión se sintió cómodo, una vida zoocial en un árbol cómodo y robusto, con buenas vistas. Al día siguiente lo mismo, vida zoocial a la hora de desayunar y cenar. A la hora de comer, ya que Gorrión no podía acercarse a comer, Pardal acercó la comida al lugar donde estaba su amigo el Gorrión. Por primera vez en muchos meses se sentía bien en un bosque ajeno, se respiraba un ambiente "familiar" a pesar de que su familia estaba lejos, en otro frondoso bosque.
CAPÍTULO XIX: Otros bosques
Gorrión volvió a cantar alegremente posado en su rama, mientras Pardal, Gaviota y Albatros iban y venían. Cuatro días fuera de su pino haciendo visitas a otros bosques más frondosos que donde vivían. Gorrión y su tórtola fueron a conocer la fauna típica de una tierra verde al norte de Hispania, una tierra a la que alguien llamó un día Vetusta. El resto de la bandada se dirigieron al centro y fueron a ver a parte de su familia. Ambas partes disfrutaron de su estancia, cada una a su modo pero disfrutaron. ¡Qué corto se hizo el pequeño paréntesis vacacional! Gorrión, que hacía meses que no se relajaba tanto y disfrutaba de su entorno se sentía bien. Miraba el pasado con recelo pero sabía que en mucho tiempo no se volvería a sentir ignorado. A su vuelta al bosque donde residían decidió intentar quedar con Lechuza pero no lo consiguió, lo de Cuervo le daba un poco igual. Gorrión era feliz en su nuevo árbol y eso era algo que dificilmente podía cambiar.

CONTINUARÁ...
Una visita inesperada
VIERNES 22 DE ABRIL 16:38 Me encuentro en mi puesto de trabajo haciendo no recuerdo el qué. Entonces un cuerpo pequeño se asoma por la puerta y hecha a volar hacia adentro. Mi pequeño amigo el Gorrión acababa de entrar en mi trabajo, se asustó porque no sabía donde se metía. Voló de aquí para allá, no encontraba la puerta para volver a salir. Se posó sobre mi cazadora, sobre el bafle de la radio, se quedó un rato en la ventana y cinco minutos después pudo encontrar la puerta. El Gorrión era joven y parecía perdido pero al final fue capaz de encontrar el camino correcto hacia su libertad. Eso me pareció una señal de que el fin de semana iba a ser bueno, y así fué. Gracias Gorrión por haberme hecho esa visita tan fugaz e intensa que me has hecho. Seguramente cuente más cosas de tu vida en mi blog ¿no te importa no?
Esto es un resumen de la vida de un gorrión escrita allá por marzo del presente año. Hoy:Al final no he vuelto a hablar más de este gorrión en mi antiguo blog. Pero en el próximo post os haré un resumen de lo que le ocurrió despues de Marzo. Para tranquilidad de los fans de Gorrión os diré que no está en su mejor momento pero que se encuentra bien, poco a poco se está recuperando de un batacazo que se dió. Os lo contaré otro día. Saludos al gorrioncillo, ese personaje pequeñito que todo el mundo lleva en su corazón.

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