El blog de la zoocióloga que quería ser escritora

ETERNAMENTE EN OBRAS - Este blogue naceu da necesidade de sacar fora o meu mundo interior, como ferramente que me axudou a aprender a expresar e transmitir sentimentos en sensacións. Escribir foi o que fixo de min unha persoa que conseguiu evolucionar ata o punto no que me atopo hoxe.

Neste blogue atoparás textos en galego e en castelán porque dependendo do día no que esscriba e dos sentimentos do momento a lingua que se pronuncia pode ser calquera das dúas.

18 diciembre, 2005

Crónica de una noche de sábado: destino final, el suelo

Ayer, como todos los sábados me fui a la cerbecería de siempre a tomar algo con un amigo, luego quedé con la tropa Verano Azul (les llamo así por el color del coche de uno de los componentes) Carro, Wishu, Toné y Roke. Tomamos un café y nos fuimos a la conocidísima Isla de la Toja (donde hacían el jabón ese, que ahora si os fijais lo hacen en Coruña) a beber unas birras y a fumar sustancias psicotrópicas, llamémosle petas.
Roke trajo en el maletero unos skates y los patines in line de Wishu, así que mientras unos liaban petas otros hacían el moñas con el skate. Hacía años que no cogía una tabla de patinar y me ponía sobre ella, pero matuve el equilibrio bastante tiempo. A las dos y pico de la mañana, tras haber jugado con los patines, el skate y el diábolo me dispuse a hacer un trayecto de despedida con la tabla de Roke, Toné y Wishu miraban como yo hacía el indio. Isa se había ido con Roke que tenía que irse a casa porque hoy le tocaba trabajar, Roke volvería despues de mi crónica desde el suelo.
Lo dicho, nos encontrábamos Toné, Wishu y yo en la Toja. Yo rulando de un lado para otro con el monopatín, Toné haciendo el moñas y Wishu sentada en el banco. Segura de mí misma decidí hacer el último viaje en tabla así que me alejo unos metros de ellos, entonces la tabla se revela contra mí y decide ir en dirección contraria a la que yo llevaba. Como consecuencia una caida a cámara lenta que termina con todo mi geto en el suelo. Para que os situeis la ostia fue tan grande como lo es mi altura (178cm, casi ná) y al parecer hice "efecto arco" (así lo denominó Toné). Me caí y todo lo larga que soy se calló al suelo, mi cara hizo rebotar el resto del cuerpo que hizo como un arco antes de caer completamente al suelo.
Consecuencias: un colorete como el de Heidy en sus mejores tiempos, pero sólo en un lado de la cara, un dolor de pómulo insoportable y un posterior dolor de cabeza, algo de aturdimiento y la recogida final de mi persona. A las tres y poco de la mañana estaba ya en cama, con un calmante para el dolor y unas ganas terribles de dormir. Soñé toda la noche con el moratón con el que me imaginaba que iba a amanecer, que después de todo no resultó ser tan grave como pensé en un principio.
Hoy todo el día con dolor de mejilla, más bien de pómulo derecho. No puedo tocarme la cara porque me duele y la noto muy caliente. No está de color morado, sólo rojo pero intuyo que mañana estará algo peor. Estoy como si me hubiese pasado un camión por encima, me duelen los brazos, la espalda y, como no, la cara de ser tan wapa.

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