Esta mañana he tenido un mail, un mail que escondía palabras insonoras, que debieron sonar hace ya días. Me he alegrado al saber que a esa persona le importa mínimamente nuestra relación, pero estas no son las mejores maneras de arreglar las cosas. Tiempo al tiempo, pues todo volverá a calmarse.
Tengo mala leche a veces, sí, lo reconozco una y otra vez. Somos yo y mis circunstancias, la vida ha hecho que reaccione de la manera que lo hago ante los distintos estímulos. No es excusa ni explicación, simplemente soy yo y todo lo que he aprendido. He aprendido a hablar, a transmitir sentimientos que antes cayaba y guardaba. Ahora hablo desde el caparazón que me protege, mis armas: la bordería, algo de orgullo y la confianza en mí misma que he ganado estos últimos meses.
1 comentario:
Como esta el patio...
Tranquilizate niña, respira profundamente y sobre todo evita escupir fuego.
Transmitir sentimientos es una buena opcion.
Un beso
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