Poco a poco y sin poder evitarlo te vas perdiendo en la inmensidad, poco a poco te alejas sin que yo puede hacer nada; como un trozo de corcho en medio del mar. Te vas y no tengo por donde sujetarte, te vas y no ve donde... simplemente te vas mientras yo me quedo en la orilla de la playa esperanza esperando un milagro que sé no ocurrirá, una lágrima resbala y cae a la arena dejando su huella, un pequeño hoyo contorneado que desaparecerá en cuestión de segundos. ¡Que sean esos todos mis males, los tuyos y los de todos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario